Las declaraciones de derechos humanos son la expresión actual de una preocupación que ha existido siempre. La pregunta por la justicia en las situaciones más diversas; el deseo de vivir en orden y en paz; la necesidad de velar y garantizar el bien común entre los pueblos y en la comunidad internacional. Son preocupaciones netamente humanas, fruto de la naturaleza política del hombre y su capacidad de dominar las cosas y el medio en que vive. En este sentido, es posible hablar de su presencia subyacente en la Antigüedad griega, en la época republicana de Roma y en el Cristianismo primitivo. No se llamarán propiamente derechos humanos, pero constituyen apelaciones a la justicia en nombre de la dignidad humana que han marcado un antes y un después en la historia de la Humanidad. La presente obra parte de un reconocimiento crítico de los logros jurídicos actuales obtenidos en el tratamiento de estos derechos para sugerir una más amplia proyección política y cultural en línea con su más genuina aspiración original.