Una pícara y dulce guacamayita advierte, a pesar de su corta edad, un cambio en la dinámica familiar: papá y mamá ya no compartirán más el nido. Mientras los adultos reordenan su historia con cierta dificultad, Morita procura sobreponerse a esta nueva situación. Un guiño inesperado revelará el modo en el que la brillante protagonista trasciende aquella realidad. Esta tierna historia alumbra el proceso que transita la infancia ante la separación de los padres, al tiempo que entreteje con mágicas palabras un nido posible, aquel donde la niñez se fortalece para crecer, desplegar sus alas y volar alto.