En todos los periodos históricos de relevancia, los medios de comunicación públicos han sido fundamentales para proporcionar información contrastada y de calidad. El conicto actual entre Rusia y Ucrania, así como ciertos contextos de populismo autocrático, han evidenciado las dicultades y retos que pueden surgir, especialmente la tentación del intrusismo progubernamental que puede alejar a las gobernanzas de sus obligaciones de garantizar una información independiente y vericada para los ciudadanos. La reciente experiencia postpandémica ha demostrado aún más la responsabilidad de los medios de comunicación. Esta coyuntura sin precedentes, resultado del connamiento global, marcará un hito en la evolución de la comunicación global. Ante estas circunstancias, este libro propone un debate esencial sobre el papel que deben desempeñar los medios de comunicación públicos. Ofrece una reexión crítica sobre el periodismo como mediador social y su rol en la reconguración del espacio público. Se analizan las causas y consecuencias de la crisis de la mediación periodística, se exploran nuevos enfoques periodísticos y prácticas de vericación, y se presta atención a la emergencia de discursos polarizadores en la sociedad.