Libro que muestra de qué modo el estudio de las lenguas estableció cierta visión de las comunidades lingüísticas y de sus relaciones, y cómo pudo utilizarse esa visión para justificar las empresas coloniales. Los problemas fundamentales de los que se ocupa son: ¿cuál es el estatuto de la lengua en la opresión colonial y neocolonial?, y ¿qué papel tiene en la lucha por la liberación nacional? La notable riqueza de esta obra ubica a su autor como un teórico fundamental de la sociolingüística.