¿Puedo hablar con mi cliente antes de que la Policía le tome declaración? ¿Debo decir algo si mi cliente no se parece a los otros que forman la rueda de reconocimiento? ¿Puedo proponer nuevas pruebas al comienzo de las sesiones de juicio oral? ¿Qué puedo hacer si se deniega el procesamiento de un imputado? ¿Debo recomendar a mi cliente que preste declaración como imputado cuando las diligencias aún están secretas? ¿Qué pasa si mi cliente reconoce su culpabilidad ante el Juez de Instrucción? ¿Qué puedo decir al Tribunal si no ha venido un testigo fundamental para mi acusación? ¿Es necesario que haga constar protesta cuando me deniegan un medio de prueba? ¿Puedo pedir la condena del acusado basándome solo en la declaración de la víctima? ¿Qué plazo tengo para presentar un escrito de acusación?
Este Manual intenta responder a algunas de estas preguntas, facilitando la tarea de los abogados que empiezan su labor profesional ante los Juzgados y Tribunales penales. Para lograr este objetivo, el libro se divide en dos partes claramente diferenciadas. La primera, dedicada a analizar de manera clara, precisa y comprensible la tramitación de los distintos tipos de procesos penales: ordinario, abreviado, juicio rápido, Tribunal del Jurado, juicio de faltas y proceso especial por injurias y calumnias entre particulares. Y la segunda, dedicada al análisis de los medios de prueba que se practican en las sesiones de juicio oral: declaración de los acusados, examen de los testigos, informe de peritos, prueba documental e inspección ocular.
Este material ayudará al abogado a tener un completo dominio de las actuaciones que se realizan ante el Juez de Instrucción y, posteriormente, ante el Tribunal sentenciador. Por tal motivo, se incluye al inicio de cada Capítulo un esquema que contiene la información esencial para saber cómo se va a desarrollar cada actuación procesal. El objetivo es proporcionar pautas para conocer cuándo y cómo se puede recurrir una decisión judicial; cómo desarrollar un informe oral de una forma clara, bien armada jurídicamente y, además, breve (el tribunal se lo agradecerá); cómo y qué pruebas debe solicitar y el modo en que éstas deben practicarse; cómo rebatir la prueba de contrario, etc.
Por todo ello, este libro va a ser de gran ayuda para que los abogados puedan celebrar cualquier actuación ante el Juez de Instrucción o el Tribunal sentenciador de forma digna, sensata, congruente y con fundamento jurídico.