Una semiología de la obra dramática es en principio una teoría del género dramático realizada con una metodología semiológica y un modelo de análisis de obras dramáticas consideradas como objetos significantes que dan lugar a un específico proceso de comunicación. Una semiótica del género dramático puede partir del esquema general propuesto por Charles Morris y puede analizar los tres niveles: sintáctico, semántico y pragmático, que pueden distinguirse en el uso textual de todos los sistemas de signos, pero no es éste el único esquema posible. En nuestra Semiología de la obra dramática vamos a seguir otro basado fundamentalmente en las unidades que están en el texto dramático escrito y se mantienen en la representación escénica. La semiología dramática estudia, pues, el proceso de comunicación dramático en sus formas y en sus relaciones, es decir, en todos sus aspectos: analiza las unidades y categorías y sus relaciones sintácticas (formas, distribución en un esquema), el valor semántico que alcanzan (sentido lingüístico, literario y espectacular) y su sentido pragmático (relaciones del texto con los sujetos del proceso de comunicación dramática y también con los sistemas culturales envolventes: religión, ciencia, artes, etc.).