En 1976 Perry Anderson concluía sus Consideraciones sobre el marxismo occidental pronosticando que la escisión dentro del marxismo entre temas filosóficos y estéticos y una verdadera teoría materialista de la sociedad sólo se resolvería con un resurgimiento de la política revolucionaria en Occidente. El presente libro, aun no siendo una continuación de aquel, tiene su origen en el incumplimiento de aquella predicción: la teoría materialista de la sociedad se ha desarrollado con fuerza insólita en Inglaterra y en Estados Unidos, donde los movimientos revolucionarios siguen siendo minoritarios, mientras en la Europa mediterránea el marxismo entraba en una crisis decisiva de credibilidad e influencia. No es preciso compartir la tesis de Anderson -que la crisis del marxismo latino es un fruto del fracaso político del eurocomunismo- para admirar la elegancia y precisión con las que resume y critica las corrientes en boga entre los intelectuales europeos de finales del siglo XX, desde el postestructuralismo al pensamiento de Habermas.
Nunca fue tan necesaria la lectura de este autor, que pasará a ser uno de los gigantes del pensamiento marxista, dada la convulsión y la fragilidad de nuestro tiempo.